EFE. 29.08.2007
El fallecido era un ciudadano rumano encargado de la obra.
Los otros doce trabajadores, rumanos y polacos, no tenían contrato.
Vivían en el mismo inmueble en el que trabajaban.
Sólo dos de ellos hablan español.
Y ahora que lo han destapado lo volverán a tapar y a otra cosa mariposa. Es lo que hay. Ellos son contratados por ser baratos y saben lo que hay. Europa paga ayudas a las empresas sabiendo lo que hay. Los españoles nos jodemos trabajando por sueldos de mierda o perdiendo el empleo. Cuando los inmigrantes empiecen a solicitar mejoras empezará la fiesta.